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España registra 331 fallecidos por coronavirus en las últimas 24 horas. Esto supone un repunte después de que este domingo, con 288 muertes, se registrase el dato más bajo desde el pasado 21 de marzo. En total, el número de fallecidos asciende a 23.521 personas, una cifra que sigue creciendo a un ritmo estable de un 0,9% diario.
Por otro lado, el número de casos positivos suma ya 209.465 personas, después de que se hayan registrado 1.831 contagiados más. De estos, las personas que han precisado hospitalización han sido 114.081. Es la primera vez desde hace semanas que el Ministerio publica el total de acumulados de todas las hospitalizaciones.
Desde este domingo el Gobierno solo proporcionó el número de nuevos infectados a través de pruebas PCR, a diferencia de los últimos días, en los que también ofrecía el número de contagios registrados a través de las pruebas de anticuerpos.
El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, aseguró ayer que la intención «no es ocultar datos» sino «espaciar» la publicación de los datos positivos de anticuerpos.
En lo que respecta al número de personas dadas de alta, sigue subiendo y son ya 100.875 pacientes, después de registra 2.144 nuevos recuperados. Por otro lado, los sanitarios contagiados ascienden ya a 37.994, el porcentaje más alto de Europa.
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«Un paso atrás puede ser más difícil que lo que hemos vivido»
Este lunes, durante la rueda de prensa diaria, Simón ha valorado la entrada en vigor de una de las primeras medidas de desescalada: la salida de los menores a la calle este domingo. Durante las últimas horas, se han sucedido imágenes en los medios de comunicación de decenas de personas en la calle, en ocasiones sin respetar las distancias de seguridad.
«Ayer se dio un paso muy importante permitiendo los paseos de los más pequeños. Es algo necesario. A medida que la epidemia va mejorando también tenía que notarse en las condiciones de vida de los ciudadanos», ha apuntado el portavoz sanitario, al tiempo que ha señalado que «fue una gran satisfacción personal» poder ver a niños por la calle.
“Poder ver a los niños por la calle es una gran satisfacción. También es cierto que en algunos casos se pudo generar alguna preocupación por ciertos comportamientos de algunos grupos«, ha apuntado, haciendo referencia a las imágenes que han circulado en las redes sociales y entre los medios de comunicación.
Según Simón, ahora es cuando se tiene «que demostrar la responsabilidad personal y familiar» para asegurar que la apertura progresiva de las medidas «no se convierta en un riesgo para la población». «Si la evolución de la epidemia no va como debe porque no se respetan las indicaciones, la fase de transición llegará más tarde o será más lenta de lo que a todos nos gustaría«, ha añadido. «Un paso atrás puede ser más difícil de lo que hemos vivido», ha concluido.
