Desde Alta Mar: «De Pie», Por @jdsolorzano

Luego del tropiezo electoral del pasado 8D los venezolanos no podemos dejarnos tumbar por la tristeza, la entrega o una derrota moral, por el contrario quienes creemos en la esperanza, en la Providencia, en Dios, debemos seguir de pie con la frente en alto para continuar trabajando por lo que soñamos.

Mientras tanto no alcanzamos la meta, sin embargo al estar levantados, al estar activos, con fe, tendremos muchas más oportunidades para hacernos con la victoria decisiva, de esto no existe ninguna duda ni hoy, ni mañana.

Los rojos-rojitos se hicieron por tercera vez consecutivas con las alcaldías del estado, sin embargo eso no significa que estemos perdidos, por el contrario esto impone un reto más fuerte aún para quienes estamos comprometidos con la democracia, con el porvenir, con la esperanza de los pueblos.

Ellos hablan de eficacia mayor y aunque son muy buenos para repetir frases como «loritos» es evidente que siempre las responsabilidades que manejan son cada vez más grandes que sus propias facultades; ¿Qué tal han sido en Puerto La Cruz las gestiones de Nelson Moreno o Stalin Fuentes? ¿Qué tal les pareció las administraciones de José Pérez Fernández y de la «negra» Inés en Barcelona?… Sí, ellos son expertos en superarse a sí mismos en la mediocridad.

¡No estamos derrotados… Eso nunca! Los demócratas estamos de pie, estamos más unidos que nunca, comprometidos con el mañana y con la fuerza necesaria para seguir adelante.

Tenemos el compromiso vigente con Venezuela, y en el caso particular, posee vivo el compromiso con mi Puerto La Cruz; no permitiremos que nos impongan un modelo que fracasó en la extinta Unión Soviética, que desde hace años da muestra de agotamiento en una China cada vez más abierta y capitalista y en una Cuba que solamente se sostiene con el puño de hierro de unos hermanos sanguinarios.

¡De pie! ¡Con la frente en alto! ¡Con la dignidad intacta! Así vamos, así seguimos, así mantenemos nuestra fe y compromiso contigo, con cada uno de los venezolanos.

Ahora inician días de apaciguamiento político ante las fiestas decembrinas, lo que no necesariamente se tiene que ver como un cese del trabajo, así como el diálogo aceptado y llevado adelante por los valientes alcaldes y gobernadores de la alternativa democrática no se puede entender como una claudicación de los principios.

¡Pa’lante! Que aún queda batalla y Dios nunca premia con la victoria total a aquellos que no confiaron en Él, ni aquellos que no conocieron las dificultades, los problemas de hoy son simples pruebas y prácticas para el triunfo de mañana. ¡A ganar… Más pronto de lo que ustedes creen celebraremos!

José Dionisio Solórzano / @jdsolorzano