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El pasado miércoles, Pedro Sánchez logró aprobar la tercera ampliación del estado de alarma hasta el 9 mayo con los votos en contra de Vox, Junts per Catalunya y la CUP y la abstención de ERC.
En cambio, el líder del PP, Pablo Casado, ha acusado repetidamente de mentir al presidente Pedro Sánchez y ha advertido en la sesión de control al Gobierno de que es posible que se abstenga en la próxima votación: Ciudadanos, a través de su portavoz Edmundo Bal, ha vuelto a las críticas y ha dejado en el aire su apoyo.
Gabriel Rufián, de ERC, ha explicado que Esquerra está ya más cerca del no. Incluso el PNV anunció ya la semana pasada que si el Ejecutivo no pacta las nuevas medidas con las autonomías su apoyo desaparecerá.
Por lo tanto, aumenta la incertidumbre sobre la aprobación de la nueva prórroga del estado de alarma, que el Ejecutivo tiene previsto pedir la próxima semana para extender su aplicación hasta el 23 de mayo.
Las críticas se han centrado la falta de diálogo del Gobierno antes de hacer anuncios de impacto, como el plan de desescalada. No cuente con nosotros si sigue así», le ha espetado Casado a Sánchez, que ha reconocido ante el Congreso que la situación económica tras mes y medio de confinamiento “es gravísima”.
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“Esta crisis no va a servir como excusa para abandonar la transición ecológica, para recortar el Estado del bienestar y para seguir precarizando el empleo”, ha replicado Pedro Sánchez a las acusaciones de mentir en la gestión de la crisis del líder de la oposición.
