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El coordinador nacional de Primero Justicia, Julio Borges, inició su declaración dominical recordando la promesa del Presidente a comienzos de 2011 de entregar 153 mil viviendas este año. “Para cumplir con esa meta tendrían que haber construido y entregado 411 casas todos los días. Al día de hoy 18 de septiembre, deberían estar entregados 105.616 viviendas y la verdad es que sólo van cerca de 14.000 nuevos techos entre los que ha construido la empresa privada y el sector público”.
Seguidamente Borges se pronunció sobre el tema de las Expropiaciones. “Tenemos que decir una vez más que el sistema económico del gobierno fracasó. En su empeño por ser dueño de todo y acabar con la propiedad privada el Presidente ha ordenado la expropiación de cientos de empresas y los resultados han sido la quiebra del sector privado y el aumento del desempleo, miles de familias venezolanas han quedado sin sustento o en peligro de perderlo”.
“Las expropiaciones realizadas en los últimos años no han generado un mayor bienestar social para sus trabajadores, ni sus familiares y tampoco para los venezolanos en general, el libro Gestión en Rojo de Richard Obuchi, Anabella Abadi y Bárbara Lira, que contiene una investigación que evalúa a 16 empresas estatales que antes era privada así lo demuestra”, explicó.
“Desde Primero Justicia presentamos los datos que aporta el documento citada en 5 casos específicos y bien representativos, tenemos el caso de la Industria Venezolana Endógena De Papel (Invepal), antigua Venepal, creada en 1954”.
“Luego de problemas financieros, los trabajadores son facultados por la actual ministra, Iris Varela, cuando era diputada, para asumir la administración de la planta. Invepal nace el 31 de enero de 2005 con una participación de 51% Gobierno y 49% de los empleados. Al día de hoy las acciones del gobierno representan el 82,7 %, adeuda dinero a quienes le vendieron sus acciones, producen sólo el 12% de la capacidad de las plantas, se han hecho denuncias de desviación del dinero de los préstamos a propósitos diferentes a los intereses de esta industria. Actualmente tiene 870 trabajadores que pueden perder sus empleos”.
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“Asimismo, tenemos el caso de Industria Venezolana Endógena De Válvulas, S.A. (Inveval); antigua Constructora Nacional de Válvulas (CVN) creada en 1970. Luego de pasar por severos problemas financieros, esta fábrica fue expropiada en el año 2005. El gobierno tenía la participación del 52%, mientras que los trabajadores poseían el 49%. Posteriormente el Gobierno pasó a tener el 100% de las acciones. Se tiene un reporte de octubre de 2009 que indicaba que la producción es menor del 15% de la capacidad de la empresa. A la fecha trabajan en Inveval 57 trabajadores y están ganando un salario de Bs. F. 1320,00 que no cobran con regularidad”.
“También nos referimos a la situación de la empresa expropiada, Central Azucarero Sucre, antigua Azucarera Cumanacoa, C. A. creada 1953 y expropiada en el año 2005. La producción es ahora mucho menor y el costo por kilo de azúcar es 3 veces mayor al precio de venta y esto ocasiona pérdidas de Bs. F. 16.160 millones. En este momento hay menos empleados que antes de la expropiación. Actualmente genera 200 empleos directos, 220 temporales y 561 indirectos”.
“Continuamos el análisis con la Planta Procesadora De Arroz Cristal, Cargill De Venezuela. En el año 2009 la planta fue expropiada porque según el gobierno no cumplía los niveles de producción y tipos de arroces. En la actualidad la producción es baja, sólo se produce un tipo de arroz, los empleados manifiestan molestias por problemas con los pagos y hay serios problemas de mantenimiento de las máquinas por lo que podría paralizar sus actividades”.
“Tenemos el caso también de Fama de América que luego de un siglo en el país, en el 2009 el gobierno decidió expropiar la marca. Sabemos que en estos momentos se importa el 30% del café que consumimos porque el gobierno y sus empresas expropiadas no están en la capacidad de producir el 100% de lo consumimos. La compra del café la hacemos a Nicaragua”, enfatizó Julio Borges.
El líder de la tolda amarilla reiteró la propuesta de la Ley de Impulso a la Producción Nacional. “Nuestra propuesta es que haya reglas claras con leyes que se cumplan y no un gobierno arbitrario que pretende ser dueño de todo y controlarlo todo. Nosotros hemos propuesto una ley de Impulso a la Producción Nacional para que las empresas abran y generen empleos estables y dignos”.
“Se trata de dar compensación a aquellas empresas que produzcan al 100% de su capacidad y que incentiven a los trabajadores. Además hemos propuesto una receta para la justicia y el progreso que no es más que poner en marcha un plan que abra las puertas al sector privado y la inversión de sus recursos”, puntualizó Borges.