La guapa mexicana que conquistó a todos en Europa

Desde que se me brindó la oportunidad de este espacio, el primer objetivo fue, más allá de compartir lo poco o mucho que sé sobre música o de expresar mis opiniones, el informar. Como lo dice mi descripción, la lejanía de mi tierra además de abrirme los oídos y permitirme descubrir nuevos sonidos y ritmos, me ha hecho valorar aún más nuestra música y encontrarme en los más remotos lugares con artistas mexicanos que con sus propuestas ponen en alto el nombre de nuestro país.

Uno de esos artistas es Graciela María, intérprete y compositora que por azares del destino (o de su propia tendencia viajera), encontró desde hace casi tres años en Berlín, la capital alemana, la base para comenzar una carrera solista, que de encontrar los medios y la exposición necesaria, tiene mucho futuro.

A temprana edad, esta artista descubrió su vocación por el arte de los sonidos y los silencios, el cual la ha llevado a, como ella misma dice, "llevar su vida en una maleta". Desde el norte hasta el sur de México, desde Nueva York hasta Berlín, presentaciones a lo largo y ancho de Europa, todos y cada unos de esos escenarios, encuentran su espacio y dan a Many Places (Muchos Lugares) esa sensación de no estar escuchando simplemente un disco, sino viajando a través de él.

Es la misma Graciela María, quien de forma muy amable nos regala unos minutos de su tiempo y en una amena conversación, nos relata la odisea de la cual ella ha sido la protagonista.

Dicho viaje inicia a la temprana edad de tres años, cuando Graciela comienza a cantar, para después escribir sus primeras canciones al llegar a los 11 años; pero sus deseos por continuar en los senderos de la música, la hacen mudarse a la ciudad de México.

"Me mudé al D.F. cuando tenía 14 años, casi 15, porque quería cantar, comencé a componer canciones desde los 11 y bueno, siempre estuve tratando de abrirme camino, de presentarme. En Campeche había un festival cada sábado y recuerdo ser yo misma quien se comunicaba para organizar todo y participar".

"Al llegar al D.F. no todo fue tan fácil como pensaba… la vida me llevó por otros lugares; estudié actuación, pero nunca deje de componer y cantar".

Es durante ese ciclo, que Graciela conoce a los integrantes de la banda Signal Deluxe, agrupación con la que comenzaría un proyecto experimental, que le permitió recorrer escenarios, hacer sus primeras grabaciones y descubrir el contacto que la llevaría a dar un rumbo diferente a su carrera.

Después del periodo con esta banda, el cual la ayudó a darse cuenta que tenía que seguir adelante y que en nuestro país parecía no ir más allá, decide mudarse a la ciudad de los rascacielos, en la búsqueda de un mejor desarrollo musical: "Me mudé a Nueva York buscando escuchar otras cosas, estaba cansada… en cuanto a la música quería ver otras cosas".

"En México tenía un pequeño estudio y siempre estaba buscando algo… con la banda que tenía este proyecto, también había letras mías, melodías. Ellos hacían la música, traían la idea y yo escribía algo ahí, pero no sentía que fuera realmente mío, aunque me encanta, lo escucho ahora y me trae muy buenos recuerdos". Nos relata.

Este movimiento sería crucial en su carrera, ya que al estar allá, sus amigos de Signal Deluxe le comunican que Robot Koch, músico-productor alemán al que ellos conocían, iba a presentarse en esa ciudad.

"Ellos ya habían venido a Berlín a tocar y siempre me contaban de la ciudad, cuando me mudé a Nueva York, me mandan un correo diciéndome que Robot iba a presentarse acá, me pasaron su correo, le escribí, me contestó y terminamos tomando un café en Brooklyn. Después asistí como invitada a su show".

A partir de este encuentro, ambos músicos continuaron en contacto, intercambiando música e ideas.

Es en el verano del 2009, que la mexicana viaja a Alemania y así comienza otra aventura, casi bajando del avión la invitan a presentarse en el conocido Bar 25 de Berlín, y a pesar de no tener nada preparado para la ocasión accede y, a dos semanas de haber llegado, ofrece su primer recital.

Es durante un viaje para una entrevista, a la cual asiste en representación del músico teutón, donde la disquera Project Mooncircle, que ya la había visto presentarse, le propone grabar un disco: "En realidad fue rápido, yo ya tenía Intro The Night desde el 2009… es de lo más movido del disco". Lo cual es muy acertado, la música de Grace (como le dicen sus amistades) va más allá de modernos y bailables ritmos: "El disco fue sorpresa para los de la disquera, ellos imaginaban todo el material así…. ellos son un sello electrónico-hip hop".

Si hay un elemento que destaca en este trabajo, es el uso de cuerdas, las cuales le dan al paisaje un tono de emotividad y dramatismo muy particular, sobre dicho detalle la entrevistada agregó: "A mí me gusta la electrónica, empecé con eso en México, pero no es lo que me mueve por dentro… cuando empiezo a escribir Many Places o Syrius, me doy cuenta de que no necesitan toda esa parte de los beats… todas las presentaciones que hacíamos eran en clubs, entonces yo no me sentía bien, la gente iba a bailar y pues tenía que hacerlos bailar, no me sentía yo, yo no soy eso, no es lo que quería decir".

A raíz de esta conversación, las canciones del disco comienzan a tomar la forma que Grace buscaba, entre ellas el primer sencillo oficial, Nothing Safe, el cual guarda una historia muy particular, ya que surge a partir de una base que le comparte su productor, ella comienza a crear una melodía y una letra: "Pasó por muchas transiciones… escribí la letra, se la mostraba, pero no estaba segura…", ¿qué era lo que no le gustaba? "La frase Nothing Safe, me daba un sentimiento muy raro al decirlo… estábamos en España, me metí al closet con la laptop, la grabe súper bajito y se la di, él la re-mezclo y cuando escuché la canción, era Nothing Safe, justo lo que no me había gustado… y bueno, al final es de mis canciones favoritas", nos comenta Grace.

A un año de la grabación de este trabajo, acerca de sus planes actuales, el principal sigue siendo, como siempre, la experimentación y la búsqueda: "Estoy enfocada a la producción, grabando y trabajando en nuevas canciones, no sé si para el próximo disco, no sé si saque algo en diciembre, un EP, estoy trabajando en sonidos, letras e ideas", nos comparte.

El pasado julio en China, un grupo de rock presentó en el festival "Rock On Asia" el cover de la canción Santa Ana Afternoons de Gace María

Los minutos transcurrieron y entre detalles y anécdotas, llegamos al punto obligado, ¿México?: "Tengo ganas, pero no sé en realidad cómo hacerlo, no tengo agencia de promoción, prefiero que la gente lo descubra… cuando voy para organizar presentaciones es por medio de amigos… para algo más grande, se tendrá que dar".

Así cerramos una enriquecedora e inspiradora plática acerca de cómo la búsqueda, el tomar las oportunidades y el dejar que las cosas sucedan, puede conducirte, paso a paso, por medio de la música a realizar tus sueños.

Seguramente la música de Graciela María la seguirá llevando a muchos lugares, ojalá uno de ellos sea a tus oídos, apoyemos los talentos mexicanos y ayudemos a que más historias como esta se sigan escribiendo.

 

                                                     

Graciela Maria para "De Sonidos Y Silencios". from The Music Basement on Vimeo.

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