Uno de cada cuatro camareros en España es inmigrante, según revela un estudio sobre el perfil de este tipo de profesionales, que indica que la mayoría son hombres, menores de 45 años y con larga experiencia en el sector.
El «Estudio Camareros 2016″, presentado hoy en el Basque Culinary Center, está patrocinado por la embotelladora Coca-Cola European Partners (CCEP) y se basa en los resultados de una encuesta realizada durante el primer semestre de este año entre 800 camareros de Madrid, Barcelona, Sevilla y Bilbao.
El informe analiza las características de un colectivo formado por cerca de 800.000 personas en España e indica que el 65 % de los camareros son hombres y tres de cada cuatro tienen entre 18 y 45 años de edad.
La inmensa mayoría no ha cursado estudios específicos en este área -no aporta el porcentaje exacto- y cuentan con una experiencia media en la profesión de 13,2 años. Además, el 27 % son inmigrantes, la mitad vive en pareja y han pasado por casi cuatro establecimientos de media a lo largo de su carrera.
Lo más satisfactorio, el trato con el cliente
Sobre su futuro, dos terceras partes de los encuestados desean promocionar o mantenerse en el escalón profesional en el que se encuentran, un 35% preferiría poder cambiar de sector y en torno a una cuarta parte de ellos está interesado en crear su propio negocio.
Aunque para la mayoría (70%) ser camarero no era su vocación, el 81% asegura que le gusta su trabajo y un 69% confía en tener éxito en el sector de la hostelería. Asimismo, para el 85 % de los participantes en el estudio lo más satisfactorio de su empleo es el trato con el consumidor, lo que lleva a la mitad de ellos a ser proactivos a la hora de hacer recomendaciones a los clientes.
El estudio establece seis clases de camareros en función de sus características: el clásico, el «despachador» -que se siente más cómodo atendiendo que recomendando-, el «joven-activo» -que ve el trabajo como un medio para sacar dinero y poder hacer cosas que le gustan más-, el «consagrado», el «relaciones públicas» y el «emprendedor». Desde Coca-Cola señalan que los «largos turnos» a los que suelen enfrentarse los camareros dificulta que accedan a formación específica.
«No les entusiasma la formación, pero el 25% busca estar al tanto de la actualidad del sector y el 33% se consideran creativos e innovadores en su trabajo», indica el documento. EFE