Las cosas son claras: si Microsoft no puede usar el nombre Metro, tampoco podrá ningún desarrollador, al menos no en la tienda del sistema operativo. Eso se aclara en una actualización a las reglas que deben seguir las aplicaciones para Windows 8, donde se indica que los programas enviados para su aprobación no recibirán la "certificación" para la Windows Store de usar la palabra Metro.
La nueva restricción podría parecer fácil aceptar, porque es una sola palabra, pero ya hay desarrolladas varias aplicaciones que llevan el nombre Metro y que estaban prácticamente listas para salir a la venta junto con el sistema operativo. Por ejemplo tenemos a MetroTwit, que es un software muy popular en la Windows Store de la versión de prueba de Windows 8, y que ahora ciertamente deberá cambiar su nombre arriesgando perder el reconocimiento de la marca.
Con esto nos queda claro que en ningún lugar de Redmond ni sus alrededores se puede decir la palabra "m*7r*" a riesgo de sufrir pena capital.